El beso del infierno - Jennifer L. Armentrout

Título: El beso del infierno

Título Original: White Hot Kiss

Autora: Jennifer L. Armentrout

Saga: Los Elementos Oscuros #1 / The Dark Elements #1

Temática: Young Adult, Romance, Paranormal, Urban Fantasy, Ángeles y demonios

Layla, de diecisiete años, solo quiere ser normal. Pero con un beso que mata a cualquiera que tenga alma, ella es cualquier cosa menos normal. Mitad demonio, mitad gárgola, Layla tiene habilidades que nadie más posee. Criada entre los Guardianes –una raza de gárgolas que tiene la misión de cazar demonios y mantener a la humanidad a salvo–, Layla intenta encontrar su lugar, pero eso significa esconder su lado oscuro de aquellos que más ama. Especialmente del atractivo Zayne, un Guardián de quien ha estado enamorada desde siempre. Cuando menos se lo espera, Layla conoce a Roth, un demonio sexy y tatuado que dice saber todos sus secretos. Layla es consciente de que debería permanecer lejos de ese chico, pero hay algo que se lo impide… especialmente cuando se percata de que con él sus besos no son mortales, ya que Roth no tiene alma. Pero en el momento en que Layla descubre que ella es la razón del violento levantamiento demoniaco, confiar en Roth no solo puede arruinar su oportunidad con Zayne… Podría convertirla en una traidora para su familia. Peor aún, podría llevarla a un viaje sin retorno al fin del mundo.

Hace algunos años leí por primera vez esta novela, y terminé por dejarla pasar cuando salió su tercer libro que, dicho sea de paso, esperaba mucho leer. Sin embargo, tiempo v, cosas pasan, y terminó por ser de esas historias que quedaron muy atrás en mi lista. Pero en estos últimos días como que no podía evitar pensar de qué iba la historia y decidí que era buen momento para darle una segunda oportunidad y de paso traer sus reseñas.

En El beso del infierno nos encontramos a Layla Shaw, una media Guardiana media demonio quien dedica su tiempo libre etiquetando demonios para que los Guardianes, seres parecidos a las gárgolas, los cacen. Cuando su camino se cruza con Roth, príncipe de los demonios, secretos sobre sus padres, su inconveniente poder de devorar almas con su beso y demonios que no deberían estar fuera del infierno están cazándolas. 

Admito que la principal razón por la que me interesó esta novela es más que nada por la autora, ya que la trama que digamos no es muy de mi interés. Sin embargo, confiando en la autora que (en mi adolescencia) me trajo muchos lindo recuerdos y buenos momentos.

Los personajes en general siento que más bien se queda corto en cuanto a que me llegaran, no puedo decir que haya amado u odiado a alguno.

Layla Shaw es una joven medio Guardián medio demonio que, además de poder etiquetar demonios para que el resto de los Guardianes los casen, puede ver almas humanas y devorarlas con un simple beso. La verdad es que no estoy segura de cómo sentirme con ella. Es difícil seguir una historia, en especial si es más de un libro, si no se le toma algo de cariño al personaje principal, y no creo haberlo conseguido con Layla. Ella es claramente una adolescente por todo el drama que hace por ciertas cosas que no salen como ella quiere, y si bien su papel en la trama principal es fundamental, como que no siento que ella haya destacado o hacho algo que la haga ser importante. En comparación con otras protagonistas de la autora, como que se queda corta y deja mucho que desear en cuanto a sus acciones.

Roth es el príncipe del infierno, quien llegó a la superficie para impedir que cierto tipo de demonio vuelvan a caminar sobre la tierra, lo que significaría un adelanto del apocalipsis. Es, a grandes rasgos, el chico malo super caliente y peligroso. Sin embargo, y algo que tengo que agradecer, más allá de ser lo que es y tener toda la pinta del chico oscuro, en realidad es el más sincero y divertido de todos los personajes. Recuerdo que la primera vez que leí el libro estaba super enamorada de él, ahora ya se me pasó, pero le tomé un poco del antiguo cariño al releerlo y encontrarme con que siendo todo chico malo, no es de esos melancólicos y un poco tóxico.

No estaba segura de si mencionar o darle tanta relevancia, pero también está Zayne, una Guardián que creció con Layla y es algo así como su mejor amigo / hermano de crianza / crush. La verdad es que para mí, es muy raro todo eso de hermano de crianza E interés amoroso, no termina de encantarme él por eso, pese a que en realidad no hace nada más que protegerla, ya se ven ciertos indicios de que hay algo más. Como personaje, me gustó aunque estuvo muy en segundo plano.

Hay otros personajes que tienen sus momentos pero que se perdieron entre los dramas e inseguridades de Layla: están sus únicos amigos humanos Sam y Stacey quienes tienen sus peculiaridades pero están de relleno, los demás Guardianes que si bien tienen sus momentos, también se pierden de fondo y solo dan un paso adelante para hacer una cosa y ya. Ah, y cómo olvidar a Morris, que directamente la autora lo hizo mudo, para no molestarse en que tenga algún diálogo. Realmente esta falta de desarrollo en los personajes secundarios hizo que la historia se sintiera plana y sin sabor, porque bien podrían haber aportado más al desarrollo de Layla, sus relaciones y vínculos que tiene o formara. 

La trama principal gira en torno a lo que es y origen de Layla, por lo menos su mitad demonio, y su utilidad para liberar a demonios más poderosos y empezar el apocalipsis un poco antes de lo programado. Sin embargo, siendo que la historia estuvo más enfocada demasiado en los dramas emocionales de Layla, sus conflictos con su poder –o maldición, dependiendo de quien lo vea- de robar almas humanas, y su lado Guardián que en realidad no tiene tanta relevancia y solo sirve para que los otros Guardianes le tengan paciencia. 

La verdad que todo eso de los Guardianes cazando demonios, siendo tan elitistas y discriminadores, y la ambigüedad que trae la presencia de Roth en la vida de Layla en relación a los demonios, como que se quedó corto y siendo el primer libro eso no tuvo que haber pasado. Es decepcionante lo poco que se desarrolla todo el contexto y lo apresurado del final. Nada importante pasa hasta un poco más allá de la mitad del libro más que dramas adolescentes mezclado con fantasía.

El romance es de esos donde la protagonista empieza teniendo sentimiento de años por Zayne, su hermano de crianza (voy a seguir recalcando esto) quien está siendo empujado a emparejarse con otra guardiana (lo que hace que Layla esté siempre celosa y trate mal a un personaje que no tiene la culpa de nada) para que aparezca chico malo, peligroso pero caliente como el pecado Roth, quien la hace sentir cosas y con quien –dato no menos- puede besar. Como dije, a mí Roth me gustó por su personalidad pese a todo lo que representa, pero o estoy muy vieja, o las inseguridades y tires y aflojes de Layla como que me desaniman. No me emocionó las interacciones de los personajes y tampoco sentí algo romántico. A menos que matar zombies sea considerado una cita.

La ambientación, como dije, se me hizo muy básica y poco desarrollada. Más allá de explicar la relación de los Guardianes con los humanos y los demonios, poco más se profundizó. Hay ciertas cosas que se mencionan, pero son desestimados por la querida Layla como algo ni importante y poco se desarrollan, lo que es una lástima porque bien podría haber conducido la historia a lugares más interesantes e emocionantes.

En cuanto al estilo de la autora, no sé qué tiene pero siempre termino leyendo alguna de sus novelas. Le tengo mucho cariño porque sus trabajos estuvieron muy presentes en mi adolescencia y me hizo conocer a muchas personitas por internet. Así que no soy muy parcial con ella.

El final… fue como si te tiraran agua fría en la cara. Todo se dio tan de golpe y de la nada, donde apareció el antagonista que ni el nombre me acuerdo porque es irrelevante, situaciones dramáticas y revelaciones que más bien bah, que me dejaron como pan sin sal. No fue tan malo como para no leer el siguiente, pero dado como se fue dando todo el libro, no debería haberme sorprendido. Claramente lo importante es el triángulo amoroso, no la trama.

En conclusión, El beso del infierno es una novela que si bien me entretuvo de principio a fin, despertó sentimiento no tan geniales en mí. Con un desarrollo confuso sin saber hacia dónde me llevaba y personajes más bien sin mucha gracia, no terminó de encantarme y realmente espero más.

Lo Mejor: Me gustó Roth, que se salga del típico chico malo de la literatura, también la idea de lo que es Layla y que no sea un super poder oculto o profecía milenaria lo que la haga especial.

Lo Peor: Que llegado a la mitad del libro todavía seguía sin entender hacia donde se quería ir. También, que al final las cosas se desarrollaran sin muchas explicaciones más de que debía pasar y pasó porque sí. 

Portada: Me gusta que tenga la misma pose y color que la primera portada original. La editorial se caracteriza por sus portadas con ese brillo que tiene también en la saga Lux de la misma autora. Solo la traducción del título como que me hace un poco de ruido. 

Calificaciones: 

Trama: 2/5 💎 💎

Personajes: 3/5 💎 💎 💎

Romance: 3/5 💎 💎 💎

Ambientación: 2/5 💎 💎

Estilo de escritura: 3/5 💎 💎 💎

Puntaje:

2,5/5